23/09/2025

Volumen 29 – Marzo 2, 1931

“Hija mía, no hay cosa sufrida y obrada por todos los santos de la historia del mundo, en que mi Voluntad no haya tomado parte haciéndose actora y concurrente de fuerza, de ayuda, de sostén en aquel sacrificio u obra que hayan hecho. Ahora, el alma ofreciéndolos a Dios como homenaje de gloria, trae a la memoria aquel sacrificio y obra, y mi Divina Voluntad reconoce lo que ha puesto de suyo en tales actos, y da la virtud de duplicar la gloria de aquel sacrificio, para Dios y para quien ha tenido el bien de sacrificarse y obrar para cumplir mi Divina Voluntad. El verdadero bien no cesa jamás, ni en el Cielo ni en la tierra, basta una criatura que lo recuerde y lo ofrezca, y se renueva la gloria en el Cielo y descienden los efectos de aquel bien en la tierra a favor de las criaturas”.

FIAT