08/02/2025

Volumen 2 – Octubre 22, 1899
“Hija mía, el camino de la cruz es un camino lleno de estrellas, conforme se camina, esas estrellas se cambian en soles luminosísimos. ¿Qué felicidad será para el alma por toda la eternidad el estar circundada por estos soles? Además, el premio grande que doy a la cruz es tal, que no hay medida, ni de largo ni de ancho, es casi incomprensible a las mentes humanas, y esto porque al soportar las cruces no puede haber nada de humano, sino todo divino”.
FIAT
Bibliografía: https://www.vaticannews.va/es/santos/02/08/s–josefina-bakhita–virgen.html